El salario de un cardenal que trabaja en la Curia Romana, es decir, en la administración del Vaticano, oscila entre 4.000 y 5.000 euros al mes, dependiendo de su antigüedad y responsabilidades específicas. Este monto refleja recortes recientes impulsados por el Papa Francisco, como una reducción del 10% en 2021 debido a la crisis económica por la pandemia y otro ajuste en noviembre de 2024, que eliminó bonificaciones como la «gratificación por secretaría» y la «asignación de oficina» (unos 500 euros mensuales).
Además del salario, los cardenales reciben beneficios significativos:
- Vivienda: Apartamentos en el Vaticano o Roma a precios muy por debajo del mercado.
- Descuentos: Acceso a tiendas vaticanas con productos más baratos que en Roma.
- Asistencia médica: Gratuita y de alta calidad.
Sin embargo, los cardenales que no trabajan en el Vaticano, como los que lideran diócesis en otros países, no reciben un sueldo de la Santa Sede, sino que dependen de los ingresos de su diócesis, que varían según el país. Por ejemplo, en España, un cardenal diocesano podría ganar alrededor de 1.250 euros mensuales, similar al salario de un obispo.
Es importante notar que el Vaticano no publica oficialmente los detalles de estos salarios, lo que genera cierta opacidad. Además, el Papa Francisco ha enfatizado la austeridad, instando a los cardenales a vivir con sencillez y evitar preocupaciones materiales.

En México, no existe un salario fijo establecido para los cardenales, ya que sus ingresos dependen de los recursos económicos de la diócesis a la que están asignados. Según reportes, los ingresos de un cardenal en México son generalmente modestos y varían significativamente. Por ejemplo, se ha mencionado que el cardenal Juan Sandoval Íñiguez, durante su tiempo en el Arzobispado de Guadalajara, recibía aproximadamente 12,500 pesos mensuales. Otros datos sugieren que los cardenales mexicanos pueden percibir ingresos similares a los de los sacerdotes, que en 2024 promediaban 7,400 pesos mensuales, aunque con el aumento del 12% al salario mínimo en 2025, esta cifra podría acercarse a 8,635 pesos mensuales para el clero en general. En algunos casos, los cardenales pueden recibir beneficios adicionales como vivienda, seguro médico y apoyo para gastos básicos, proporcionados por la diócesis.
En contraste, los cardenales que trabajan en el Vaticano tienen un salario fijo de aproximadamente 4,000 a 5,000 euros mensuales (alrededor de 75,000 a 94,000 pesos mexicanos), lo que refleja una diferencia notable debido a las estructuras económicas de la Iglesia en cada región.